La ‘baby shower’ es una fiesta que consiste en la celebración previa al nacimiento del bebé. En esta celebración se agasaja a los padres con regalos.
Es de tradición americana, en esa fiesta las madres más experimentadas compartían consejos con la futura mamá, pero en la actualidad la atención se centra en los regalos.
En el siglo XIX, la mujer no podía mostrar su embarazo, por lo que la madre reunía a sus amigas para tomar té y ya con el recién nacido en brazos.
Pero, después de la Segunda Guerra Mundial ya no era necesario esconderse. Y ya no es solo una reunión de amigas, sino que pueden acudir los abuelos, familiares y el padre del bebé.
Entre ellos no deben faltar todo tipo de accesorios que se emplean para la higiene como los pañales, los set de baño o toalla; la ropita del bebé como los bodis, peleles, pijamas, leggins, gorritos, patucos o calcetines; y los accesorios de alimentación como sacaleches, biberones o baberos.
Si tenemos capacidad para hacerlo, también podemos hacer regalos de mayor presupuesto entre varias invitadas, como la cuna, la bañera, el cambiador, la hamaca, el vigilabebés, el carrito de paseo, etc.
Otra opción es hacer un regalo a los padres o a la madre de forma individual, como una joya grabada. En España cada día tiene más presencia y suelen ser las amigas o familiares de la embarazada quienes se encargan de organizarlo.
El periódico digital Okdiario informa que es aconsejable «organizar el ‘baby shower’ en una fecha en la que la mujer no esté teniendo muchas molestias a raíz del estado de gestación. En este sentido, hay que exponer que la celebración debe llevarse a cabo cuando se encuentre bien y no teniendo molestias tales como vómitos, náuseas, mareos…».
Para decorar esta fiesta puedes recurrir al estilo naif y también puedes tener en cuenta los gustos de los padres. Lo mejor es que sea sencilla y opta por colores pasteles o neutros, como el celeste, rosa o un verde suave.
También puedes buscar otras tonalidades como el naranja, o combinar el blanco y dorado.
Esto lo saben bien los profesionales de Carnaval y Mucho Más, ya que son expertos en disfraces de carnaval para niños, niñas y adultos, así como en artículos para decorar fiestas, cumpleaños o ‘baby shower’.
Ellos explican que las temáticas idóneas para ambientar una ‘baby shower’ son los unicornios, los animales, los piratas, los ositos, los personajes de dibujos, los bailarinas, los motivos espaciales, etc.
Tampoco pueden faltar las guirnaldas de tela o de papel con el nombre del bebé. Otros accesorios decorativos que puedes incluir son los globos, pompones, farolillos y pizarras con mensajes.
Con las cajas con letras que se rellenan de globos puedes indicar el nombre del bebé. La revista Diez Minutos informa que «a la hora de elegir el sitio donde celebrarlo hay que tener en cuenta a cuánta gente vamos a invitar. Si es una fiesta pequeñita, el salón de casa puede ser buena opción, pero si va a acudir mucha gente, buscar un espacio que tenga jardín, por ejemplo, puede ser la mejor opción. Un restaurante también es una alternativa muy extendida».
No te olvides de la comida, así que debes tener en cuenta las siguientes recomendaciones:
Tarta
La tarta debe ser tematizada y personalizada con el nombre del bebé. Son muy famosas las tartas tipo fondant de osito, unicornio, princesa, etc.
Un dato muy curioso es que en Estados Unidos se decora la tarta para anunciar a los padres el sexo del bebé.
Mesa dulce
La mesa dulce o ‘candy bar’ se decora con donuts, cake pops, golosinas y cupcakes con los colores de la decoración y que incluyan el nombre del bebé.
Juegos divertidos
Para que la fiesta no se haga larga, es aconsejable organizar algunos juegos como los siguientes:
–Adivina la papilla: Los participantes con los ojos cerrados prueban una cucharada de papilla y tienen que adivinar el sabor. Gana el equipo que más papillas adivine.
–Vestir un muñeco: Los invitados con los ojos tapados, jugarán por parejas y se les pedirá que vistan a un muñeco con ropa de bebé. Gana quien lo consiga lo más rápido.
–Dedicatorias de todos los invitados: Es aconsejable tener un libro de firmas en el que los invitados le dediquen unas palabras al bebé.
–¿Cómo era yo de pequeño?: Los
invitados deberán acudir a la fiesta con una fotografía de cuando eran pequeños. Podéis colocar las instantáneas en un panel y luego adivinar qué adulto es el niño de cada una de las imágenes.
–Adivina el nombre del pequeño: Si los padres no han compartido con nadie el nombre del bebé, pueden crear una especie de gymkana por equipos. Es aconsejable organizar distintas pruebas en las que el ganador de cada una obtendrá una letra del nombre del bebé. Luego, deberán adivinar con las letras conseguidas cómo se llamará el pequeño.